GALICIA
La Xunta prepara una funcionarización del personal laboral fijo mediante una oposición en la que se conocerán las preguntas y podrán consultarse textos legales
El pacto es fruto de un acuerdo entre la Consellería de Facenda y los sindicatos CC.OO. y UGT
Con el objetivo de reducir la temporalidad en el sector público a un 7%, la Xunta de Galicia ha hecho público el acuerdo por el cual el personal laboral fijo de la Comunidad Autónoma podrá acceder al Cuerpo de Funcionarios mediante un proceso selectivo con todas las facilidades, si bien queda fuera el personal laboral indefinido La intención es afianzar un total de 2.177 plazas públicas hasta 2020, siendo 577 los puestos ofertados en esta primera fase.
El acuerdo a que han llegado la Consejería de Hacienda de la Xunta y los sindicatos Comisiones Obreras y UGT supone que aquellos que se presenten a la oposición se enfrentarán a un ejercicio tipo test, de entre 50 y 120 preguntas según la categoría, en el que conocerán de antemano las posibles preguntas y al que podrán asistir con textos legales para su consulta durante la prueba. Las preguntas contendrán tres respuestas alternativas, que además, no penalizarán en caso de error. En este particular concurso-oposición, el examen teórico supondrá un 60% de la puntuación total, mientras que el 40% restante corresponderá a valoración por antigüedad y resultados de otros procesos selectivos.
Mientras que CC.OO. y UGT tratan de negociar el número de preguntas y el contenido de los temarios, los sindicatos CSIF y CIG, que ya en su momento se apartaron del acuerdo a que se estaba llegando con la Xunta, insisten en que la oposición que se pretende “es un disparate” y “un trámite burocrático”. Estos últimos sí quieren entrar a negociar las categorías que se acogerán a este proceso y de qué manera lo harán, plantando cuestiones como la de qué pasará con la jubilación parcial. Ciertamente, personal laboral y funcionarios se rigen por normas legislativas diferentes, y el paso de un cuerpo a otro puede suponer, a pesar de las facilidades con las que se puede lograr, algunos inconvenientes para los trabajadores que, en cambio, beneficiarán económicamente a la Administración.
Comisiones Obreras ha defendido su postura argumentando que los aspirantes no dispondrán de las preguntas del examen, sino de una batería de cuestiones de la que saldrán las que constituirán el ejercicio. También ha negado que los opositores puedan acudir con apuntes, especificando que lo que podrán aportar serán textos legales de consulta. Por último, y ante las críticas que semejante proceso selectivo está recibiendo por parte de otros sindicatos y funcionarios, el sindicato ha protegido su posición explicando que los trabajadores beneficiados por esta funcionarización ya se enfrentaron en su momento a un proceso de selección.
A la espera de ver cómo se desarrolla este acuerdo tan polémico, lo cierto es que tiene cierto aire de “traje hecho a medida”, que para muchos es sinónimo de injusto.