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ESPAÑA
Hormigueo y debilidad muscular son algunos de los síntomas del Síndrome de Guillain-Barré
La baja incidencia en términos de población hace que se considere una enfermedad rara
El Síndrome de Guillain-Barre es un trastorno por el cual el sistema inmunológico ataca por error al sistema nervioso periférico. Puede comenzar por un leve hormigueo en las extremidades que puede extenderse hasta llegar a la parálisis. No se conoce una cura concreta, pero puede aplicarse un tratamiento para aliviar los síntomas y acortar en el tiempo la pervivencia de la enfermedad, requiriendo hospitalización.
Aunque no hay una causa concreta, es habitual que Guillain-Barré venga precedido de episodios infecciosos como influenza, algunas enfermedades gastrointestinales, neumonía por micoplasma, VIH, herpes simple o mononucleosis. También puede aparecer a raíz de sufrir lupus eritematoso sistémico, Enfermedad de Hodgkin o tras pasar por una cirugía.
Algunos síntomas asociados son hormigueo y pinchazos en las extremidades; debilidad muscular; inestabilidad al andar; dificultad para realizar movimientos faciales, para controlar la vejiga o el intestino, o para respirar; dolor intenso; frecuencia cardíaca rápida; y presión arterial baja.
Aunque Guillain-Barré es el nombre genérico, este trastorno puede darse en diferentes formas, cada una de las cuales acentúan algunos de los síntomas mencionados. Dichas formas serían la polirradiculoneuropatía (la debilidad muscular localizada en la parte inferior del cuerpo va extendiéndose hacia la parte superior), el Síndrome de Miller Fischer (la paralización comienza en los ojos y va asociada a la inestabilidad al andar), neuropatía axonal motora aguda, o neuropatía axonal sensitiva motora aguda.
Guillain-Barré es un síndrome que puede afectar a cualquier persona, aunque tienen mayor riesgo los hombres adultos de entre 30 y 50 años. En cuanto al pronóstico, se calcula que en torno al 80% de los pacientes se recupera por completo en menos de un año. Entre un 5 y un 10% de los afectados quedarían con una invalidez de carácter grave, y alrededor de un 4% de los casos tienen como resultado la muerte.
En cualquier caso, se recomienda consultar al médico en caso de notar un ligero adormecimiento de las extremidades, y acudir a un servicio de emergencias si se nota cualquiera de los síntomas detallados de manera intensa o con progresión rápida.